Olvidar el pasado es cosa de ignorantes. Una nación que olvida su pasado está condenada (esperemos que no) a repetirlo.
La izquierda cree que sólo hay democracia cuando gana ella. Y a las pruebas me remito. Empezando por el "Pacto del Tinell" y acabando por el golpe de estado socialista contra la II república de octubre de 1.934.
En los enlaces arriba referidos podemos comprobar cómo antes de la insurrección de Franco (que no apruebo, antes de que la progresía me dedique bonitos calificativos) el PSOE organizó, apoyándose en la extrema izquierda más radical, un golpe de estado. Y también vemos la participación de Indalecio Prieto en dichos actos.
Y cómo guinda de este pastel, un resumen de los criminales actos de aquellos días, que muestran la verdadera cara del socialismo
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